Convirtiéndose en una de las más grandes y famosas de la ciudad, los fines de semana sus caminos se pueblan de miles de puestos de artesanías, transformándola en un verdadero mercado al aire libre, donde abundan los objetos en cuero, plata y vidrio de excelente calidad. Andrés, responsable y mentor de uno de los puestos dedicados al cuero se refiere al paseo como “fundamental si se visita Buenos Aires. No solo por el atractivo que genera el lugar y la posibilidad de disfrutar de un poco de naturaleza en medio del cemento, sino también para conocer y apreciar a los artistas callejeros que gratuitamente ofrecen múltiples espectáculos y a los artesanos que se ganan la vida vendiendo su arte”. El “regateo”, como cualquier feria que se precie de tal, no está ausente.
Dentro de la misma plaza, el Centro Cultural Recoleta brinda distintas variantes culturales. Ubicado en una de las construcciones más antiguas que se conservan en
En conclusión, Plaza Francia se adapta a todos los gustos, tanto si se quiere pasar el día al aire libre en compañía de espectáculos de música, malabares o porque no conociendo nuestro futuro, recorriendo una de las mayores ferias artesanales de la ciudad o apreciando uno de los mas importantes centros culturales de Buenos Aires.
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